sábado, 2 de mayo de 2015

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Defendámonos coherentemente

Hoy me he encontrado con este vídeo. No había visto el original y me han llamado la atención algunos comentarios, así que lo he hecho para poder tener una opinión algo más clara. No sabría decir en qué orden es mejor verlos.

Comenzaré diciendo que entiendo perfectamente el propósito de la parodia y no me parece mal, aunque tampoco es que la considere divertida, pero eso es otro tema. El problema no es ese en absoluto. El problema está en que la descripción sea: "el vídeo más feminista".
Como siempre, hay que tener mucho cuidado con estos términos. Por suerte o por desgracia, feminista quiere decir que busca la igualdad de género. Estamos suponiendo de entrada que el videoclip original es machista, así que esto, que en mi opinión trata peor a los hombres de lo que ocurre con las mujeres en Blurred lines, sería hembrista, ¿no? Se podría entender como feminista en el sentido de que busca que la sociedad se dé cuenta de lo que significaría intercambiar los papeles y todo eso, pero el vídeo en sí no lo es. De hecho, a mí el original no me parece para tanto, he visto cosas peores.

Por otro lado, está la gente que directamente suelta que el hembrismo no existe porque no hay una sociedad matriarcal. Bueno, puede no existir como concepto generalizado, pero eso no significa que no haya que tener en cuenta los casos aislados, que cada vez son más, que sí existen. Y es que cada vez es más difusa la línea entre lo que es igualitario y lo que no, lo que hace que el problema sea aún más significativo: ¿cómo vamos a unirnos en una lucha por la igualdad si cada uno quiere algo distinto?

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Creo que no es lo mismo. Hablar de ese hembrismo/mujerismo no convierte la charla en una pieza del feminismo, como tampoco lo hace si nombramos el término "gente" no transformaría un texto en parte de la teoría de la democracia. Se puede hablar de hembrismo sin tener óptica feminista.

Pero, si el feminismo empieza a tener éxito, vende, y si vende, nos dan gato por liebre. Y es lo que sucede con el vídeo, con la parodia. Ahora se lleva hablar o editar sobre mujeres, pero por mucho que se repitan esos términos no convierten a determinados productos en aceptables. Y más si estos intentan eludir a los correctos.

Cambiando un poco la visión, es muy raro ver como alguien desata su misoginia en público, no me refiero al ámbito privado, es cierto que alguno existirá, y pobre de él. Lo que suele hacerse es colocar a una mujer, la cual estará formando ese papel por algún interés de poder propio. Y ésta será el antihéroe donde ninguna mujer ni podrá ni querrá verse reflejada.

No se suele mirar de igual manera lo que se supone desigual. Si un chico interviene mucho en una clase, es que tiene iniciativa: Si lo hace una chica es que quiere hacerse notar. A algunos la libertad de las mujeres no les gusta, y a las instituciones tampoco.

Hace no tantos años, cuarenta para ser exactos, se pensaba que si una mujer se "convertía" al feminismo (paridad absoluta) era porque no era una mujer como es debido. Y todas esas mujeres, aparentemente monstruos, intentaban arrastrar a las demás, las sanas a lugares tan inadecuados como la enseñanza, la política, o los derechos civiles.

En muchas obras, de literatura sobre todo, se las acusaban sin prueba alguna. Se acusan a las feministas de no poder ser madres, llegando a temas sexuales estrictos, buscando el límite, e intentando amenazar al pudor.

Ahora ya no tienen que oponerse a mandatos estrictos o códigos civiles o penales. Y me parece un error, porque por ello el umbral de sensibilidad de la mujer joven, que es la que tiene todo el peso histórico para cambiar la situación, se encuentra atrofiado para discernir la discriminación. Ahora la condición femenina está presidida por una expresión de Simone de Beauvoir "mil lazos tenues". Existe, por así decirlo, un espejismo de igualdad.

A las que intentan destacar se las quita del medio, no existe ninguna mujer que sea el faro que guie a las demás. En un panorama donde todo vale y donde la depredación social está bien vista, la especie femenina cae al primer golpe, y los más voraces son los que marcan el espacio. Las mujeres tienen derecho a ese mal, pero ese escenario de maldad no las favorecerá nunca, ni individualmente (cualidad que muchas de ellas poseen) ni colectivamente. Cada vez que una mujer sufre de forma individual una injusticia en un mérito que haya conseguido, todas pierden.

Si se le preguntara a una feminista ¿qué es eso del feminismo? bien podría responder: " no sé muy bien qué es eso del feminismo pero me doy cuenta que me llaman feminista siempre que expreso mis sentimientos que me diferencian de una papelera.

Pero, ¿qué diferencia podría apreciarse entre un hombre y una mujer en igualdad de condiciones?.

Hasta luego.

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